La futilidad... Eso que habla de todo lo que es y no es importante... La banalidad de las cosa, la fragilidad de la vida, la nula importancia de lo terrenal ante el cruel y seguro llegar de la muerte... Lo fútil y el nihilismo, dos caras de la misma moneda...
Lo fugaz, lo efímero sinónimos que se diferencian en la huella que uno y otro dejan dentro de cada quién... Así como un amor puede ser fugaz y dejarte marcado para siempre y una situación efímera se olvida al despertar del siguiente día...
Y es aquí donde todo converge, en la infamia, la cobardía y la absurdidad. Cómo cuando nos sabemos parte de algo, cuando para alguien tú eres un momento efímero que será reemplazado cuando alguien que tenga todo lo que tú no puedes ofrecer, o todo lo que no te pueden ofrecer... cercanía, atención, amor, hasta un vientre útil.
Cómo es que se llega hasta donde estamos? Somos el cruel amasijo de futilidades ordenadas entre recuerdos fugaces y momentos efímeros...
Nada duele más, que ser efímero para alguien a ti, significa lo fugaz...
Y es que así es la vida, el amor, la locura, el sexo y la realidad... Dónde la fugacidad puede durar 1 mes o q año, mientras que lo efímero aunque dure una vida, puede ser más doloroso...
Y así llegamos, a un compendio de palabras e ideas futiles que nada dicen y que gritan más en lo que callan... Pero que dentro de su fugacidad perdurarán en el corazón hasta que el músculo cerebral deje de funcionar...
~Arlekín Valdivia~
